domingo, 2 de marzo de 2014

"Confesiones nocturnas."

"Escribo esta carta para poder desahogarme.

Tengo que contar que me di cuenta de que estoy enamorada. Es increíble. Todo el tiempo estuve negándolo, pensando que no estaba enamorada, puestos que ya lo estoy. Pero me equivoqué. Me volví a enamorar.

Puede ser algo muy hermoso el amor, pero quiero reprimirlo y dejar de sentirlo, por el simple hecho de que sé que esto no llegará a ninguna parte. No quiero llegar a sufrir más de lo inesperado.

Una forma de intentar olvidar estos sentimientos, es bebiendo alcohol. Es gracioso porque pienso que con alcohol consigo olvidarlo, con lo que bebo más, y así continuamente. Sé perfectamente que no es buena manera de olvidar algo, pero por no recordar este dolor que se siente, lo que sea. Llega un momento en que empiezo a autodestruirme. No paro de beber, sigo más y más hasta que llego al punto de las drogas.

Llego a las drogas porque necesito olvidar más. Ya son demasiados problemas en mi cabeza, no es sólo el sentimiento. Demasiados problemas y en vez de enfrentarlos, escapo de ellos a través de alcohol y drogas. Empiezo y no paro, es un no parar. Pasan los días, y cada vez me destruyo más. Así hasta que llego al fin de estar completamente destruida, sin que nadie me pueda arreglar. Pero no pasa nada, porque saco una sonrisa y todos acaban creyendo mi sonrisa forzada.


Atte: Una enamorada."

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