domingo, 29 de noviembre de 2015

Voluntad.

Es extraño. Después de tanto, he acabado por conseguir animarme yo sola. Sin necesidad de nadie. ¿Sabes aquel sentimiento de frustración que tienes cuando no te sale algo? Y dime, ¿al final consigues animarte para seguir con ello? Porque yo sí. Poco a poco voy ganando en la guerra de mi mente contra yo. ¿Qué decir sobre que cuando acabo totalmente exhausta, consigo de alguna manera animarme? ¿Y aún sin haber dormido, de alguna manera consigo divertirme por las mañanas? ¿Y estar en estos momentos haciendo todos los deberes para no tener nada pendiente? Cada vez tengo mi mente ocupada en cosas que debo hacer día a día, y de alguna manera consigo animarme para seguir con ello. Anteriormente, no hubiera hecho ninguna tarea y me hubiera ido a dormir, sin importarme los negativos que me cayeran. Claro, eso era cuando estaba cansada a las 12 de la noche. Pero mírame ahora. Estoy despierta a la 1:31, haciendo las tareas de filosofía. Será una tontería, pero para mí es un gran avance. Es un gran avance porque me doy cuenta de que si paso por esto, podré con todo. Y, soy feliz. Soy feliz de poder conseguir hacer todo lo que me he propuesto, sin importar de mi estado físico y psicológico. Soy feliz de por fin poder animarme sin ayuda de nadie. Por esto, sí me siento orgullosa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario