miércoles, 4 de diciembre de 2013

"Solo era ella, queriendo ser ella."

Y solo era ella, queriendo ser ella. Quería tener un amor feliz, quería tener muchos amigos, quería sacar notas buenas, quería ser sociable, quería sentir cosas, quería ayudar a los demás, quería tener excursiones, quería tener sentimientos, quería tener fiesta, quería tener amigos con derecho a roce, quería fumar, quería tener droga, quería hacer de reír, quería divertirse, quería tener preocupaciones, quería llorar, quería amar, quería enfadarse, quería entristecerse, quería dolor, quería animarse, quería tener euforia, quería sentir decepción, quería tener sorpresas. Tantas cosas que quería, como cualquier otro ser humano normal. Pero no, ella no puede. ¿Por qué? Porque no siente nada. Desde aquel día, para ella todo le cambió. Aquella persona que se fue, se fue llevándose consigo todo lo que esa chica sentía. Parecerá una broma, pero no lo es. A ella le dices que le has mentido en su cara y dirá que le habrá molestado o que está enfadada. Pero no, en ese momento ella no siente nada. Ni furia ni decepción ni nada. Le puedes insultar, pero tampoco le afecta. Ella no siente nada, pero es consciente de las consecuencias que puede tener si actúa como es ahora. Con lo que entonces, hace como si sintiera algo, pero le duele. No le gusta fingir cosas que no siente. Ella sintió un verano por alguien. Ella volvió a sentir. Pero lo perdió. Porque esa persona... la abandonó. Así que ahora, digamos que ella está llevando a cabo un dolor tan grande, demasiado que no permite sentir nada más.




Ella... se volvió fría. Y dejó de ser ella.

domingo, 24 de noviembre de 2013

"Lo que yo quiero."

¿No podéis dejar de decirme "es por tu bien" y empezar a pensar qué es lo que yo quiero verdaderamente? Porque parece que ni os inmutáis por eso.

Vale, sé que os preocupáis por mí y que queréis lo mejor para mí, pero... eso no es lo que quiero yo. Yo quiero lo que me dice el corazón, lo que realmente siento. Cuando me decís que me olvide de alguien por mi bien, yo realmente no quiero. Simplemente es que no es lo que siente mi corazón. No sé, pero cada vez que oigo o leo un "es por tu bien" me siento verdaderamente mal, porque es como si me estuviesen diciendo que lo hacen así porque sí... no sé, me es difícil de explicar lo que siento. Pero la frase "es por tu bien" no me gusta para nada. Lo que realmente quiero es que dejéis de decir eso y me digáis "¿Qué es lo que quieres?". Tan solo eso, entenderme por favor os pido. No es bueno para mí que hagáis tantas cosas "por mi bien" y no por lo que quiero yo de verdad.

miércoles, 20 de noviembre de 2013

"Me perdí en tu mirada."

Este poema lo ha escrito @Bea_aranda97 y me ha encantado de tal manera que he querido publicarlo. 

Me perdí en tu mirada,
y así todos los días,
así estoy andando,
¿no me ves que estoy perdida?
A todas horas, cada mañana,
mis sueños se van volando.

¿Por qué me tuve que perder?
Ya no sé volver a casa.
No hay nada que temer,
supongo,
estoy aquí, en la nada.

No volveré a seguir tus ojos,
no volveré a creer tu mirada,
no volveré a ser tu apoyo,
no me verás otra mañana.

¿Y que más da perderme?
No te importo, me olvidaste,
me quise ir,
no quisiste buscarme.

Me dejaste ir
¡pues ya está!
No regresaré, lo prometo.
No estaré al final de la meta,
solo nos conocemos de un largo tiempo.

¿Por qué lloras con estas palabras?
¿Acaso no era lo que querías?
Era esto lo que pasaba,
no me niegues que no lo sabías...

domingo, 17 de noviembre de 2013

He perdido.

He perdido la ilusión de vivir. He perdido las ganas de querer sonreír. He perdido la esperanza de que algo saldría bien. He perdido la ganas de querer estar con alguien. He perdido la esperanza de que tendría a alguien aquí. He perdido las ganas de hablar. He perdido las ganas de querer salir. He perdido las ganas de ver a la gente. He perdido la ilusión de dibujar. He perdido la pasión que sentía por el baloncesto. He perdido el gusto que sentía al escuchar música. He perdido cada pedazo de mi corazón y ahora no las encuentro para unirlas. He perdido las ganas de seguir adelante. He perdido las ganas de confiar en alguien. He perdido las ansias de que sea ya un fin de semana. He perdido la gran euforia que sentía por las mañanas. He perdido las ganas de dar los buenos días o buenas noches. He perdido las ganas de sacar una sonrisa a alguien. He perdido cada trocito de esperanza por todo el universo. Simplemente, me he perdido a mí misma.

domingo, 3 de noviembre de 2013

Espero que seas feliz.

No sé si estarás leyendo esto, pero aún así lo digo.

Espero que seas feliz, sí. Me gustaría que fuese por mí, pero como nunca me darás la oportunidad de hacerte sonreír, lo único que puedo hacer ahora, es desearte seas feliz. Espero que todo te vaya bien, espero que siempre te encuentres bien y que nunca olvides que yo todavía te quiero. Y que sepas que solo tú conseguiste hacerme sentir bien cuando yo creía que nadie me sacaría de este pozo. Me hiciste feliz y no sé cómo lo hiciste, pero tú me hacías sentir bien. Ahora tal y como están las cosas, he vuelto al pozo, y creo que estoy bajando más y más por cada día que pasa. No me digas que me olvide de ti o que deje de hacer todas esas cosas, porque sabes que soy cabezona y no suelo hacer caso. Pero no te preocupes, tan solo ahora me importas tú y tu felicidad. Se feliz con las personas que te quiere. Se la misma persona que yo conocí aunque ahora no me lo muestras. No dejes que nadie te engañe y te robe esa gran y hermosa sonrisa que tienes. Diviértete todo el tiempo que puedas. Intento hacer otras relaciones, pero siempre que llego al punto de tener una, me rajo. ¿Por qué? Porque simplemente no puedo desde el 30 de marzo. Solo podría con una persona y sabes perfectamente que sería contigo. Pero como no tengo oportunidad... solo puedo desear que lleves una vida llena de felicidad.

PD: dedicada para una persona cuyo nombre empieza por I.

domingo, 27 de octubre de 2013

Una foto en la cartera.

Esto me ha emocionado. Tanto que he querido compartirlo. Quién la ha escrito es @NereaNerNerea.

Una foto en la cartera.

Que yo quiero que alguien
lleve una foto mía en la cartera,
arrugada y rota por la esquina de abajo.

Y que la desgaste a besos.

Que la deje bajo la almohada
las noches en las que no duermo en su cama.
Que la mire en las madrugadas de insomnio.
Y pasee los dedos por mi sonrisa.

Quiero que alguien
lleve una foto mía en la cartera,
con un verso detrás
y una fecha.
Todo escrito con tinta negra,
letras ligadas,
sin faltas de ortografía y con punto final.
Un punto sutil que se pueda confundir
con un cuarto de mota de polvo; que casi se pueda soplar.

Y con mis labios marcados.
En rojo.
Muy rojo.
Tan rojo que parezca
que besa el corazón y no una boca malhablada.

Quiero que alguien
lleve una foto mía en la cartera,
y una noche cualquiera en un bar cualquiera
de cualquier ciudad con mar
se la enseñe a sus amigos y ellos digan:
“¿es ella?”
Y que responda: “es ella”.

"Si amas algo déjalo ir."

"Si amas algo déjalo ir."
Muchos dicen que es una buena frase y un buen consejo. Pues yo no pienso eso. Si amas algo, o alguien, demuéstrale que es así. No lo dejes ir aunque te haga daño, no dejes que nadie te lo quite y demuéstrale que lo/la amas. Si lo haces, aunque te produzca dolor, en el fondo sentirás una alegría por demostrar que realmente lo amas a pesar de todo, y también no te quedarás con la duda de "¿Y si...?".

Yo en estos momentos quiero a alguien. No estoy enamorada pero quiero mucho a esa persona. Y a pesar de todo lo que está pasando yo sigo aguantando e intento demostrarle que me importa demasiado. En estos momentos creo que no he demostrado nada, pero llegará el día de su cumpleaños y le demostraré con un detalle que mi "para siempre" es cierto y lo cumpliré hasta que el alma de mi cuerpo desaparezca.


"Nunca me iré, pase lo que pase."

martes, 22 de octubre de 2013

Celos.

Yo tengo celos, soy celosa, y creo que todos lo somos aunque algunos lo nieguen. Tenemos celos, y que esa palabra no es malo del todo. Celos significa tener miedo de perderte, tener miedo de que alguien descubra la belleza que obtienes, tener miedo de que alguien se de cuenta de que tienes una sonrisa que encanta, tener miedo de que vean que tus ojos son hermosos, tener miedo que alguien consiga quitarme de tu vida, tener miedo de que alguien te enamore y a mi me dejes de lado, tener miedo de que otra persona te haga de olvidarme, tener miedo de que alguien te cuide mejor que yo, tener miedo de que te guste más los abrazos de otra, tener miedo a que te hechicen más las palabras de otra que de los míos... Tener celos es tener miedo a perderte. 






Y yo aunque no te hable, sigo teniendo celos.

domingo, 20 de octubre de 2013

¿La distancia es mala?

Sí, pero también tiene su parte buena. La mala está en que no podemos tocar a esa persona, pero solo tiene eso de malo. Pasa que aunque sea solo una cosa, es algo que necesitamos realmente. Hay veces en la que estás hablando con esa persona a través de una pantalla, y te dan unas ganas de querer atravesarla para poder tocarla. Ese sentimiento de querer tocarle/a nos llega incluso a deprimirnos, pero con el tiempo acabarás viendo a esa persona.
La parte mala he escrito poco, porque seguramente no hace falta poner algo más.

Ahora la parte buena sobre la distancia puede ser un poco largo. La distancia no siempre es mala. Vale sí, nos jode por una parte pero por otra parte también nos beneficia. "La distancia separa cuerpos, no corazones", hay poca gente, de hecho creo que conozco como mucho dos personas que entiende su parte buena. La distancia nos hace de ver si la otra persona nos quiere realmente o no. Si le gustas mucho a una persona, no dejará de hacerlo interponga lo que se interponga en su camino. Una relación a distancia fortalece mucho a las parejas, y también fortalece las amistades. Después está el día en que le/la vas a ver. Sientes escalofríos, sudores e incluso, nerviosismo. Por fin vas a poder verle/a, cara a cara. Por fin vas a poder ver a la persona que solo has podido compartir momentos a través de una pantalla. Por fin vas a poder tocarle/a, abrazarle/a, tomarle la mano, jugar con él/ella e incluso besarle/a. Por fin vas a poder compartir momentos AL LADO de la persona que quieres. Justo cuando estás con él/ella, sientes una gran felicidad y alegría por haber podido aguantar mucho tiempo para compartir ese tiempo valioso. Vas a aprovechar cada minuto que pase, sin desperdiciarlo, sin peleas, sin discusiones, solo sonrisas y tonterías. Yo pienso que si alguien te gusta mucho, debes demostrarlo, a pesar de los kilómetros que os separe. No dejes que unos puñeteros kilómetros hagan que no demuestres lo tanto que quieres a esa persona, luego puedes arrepentirte. Lucha por lo que quieres, pase lo que pase.

jueves, 17 de octubre de 2013

Esta entrada es para decir a mis lectores que si quieren mi Twitter aquí lo tienen: @esteficonverse
Y si quieren mi Instagram, aquí: esteficonverse
O si quieren preguntarme, aquí: ask.fm/esteficonverse
Ya, nombres muy originales xD
Un beso chavalotes. 


viernes, 11 de octubre de 2013

~De suspiro en suspiro~

Despertar cansada, ojos hinchados, cara asqueada, no tener ganas, no moverte de la cama, querer volver a dormir, levantarte, cambiarte, ir al baño, limpiar la cara del maquillaje estropeado, mirarte al espejo, párpados caídos, labios rojizos, ojos rojos, odiarte, prepararte, peinarte, maquillarte, salir del baño, hacer el desayuno, desayunar, limpiar la mesa, subir a tu habitación, hacer la cama, subir las persianas, volver a mirarte al espejo, fingir una sonrisa, volver a bajar, coger tu mochila, ponértela en la espalda, salir de tu casa y pensar "Otro día más. Otro suspiro ahogado."

viernes, 4 de octubre de 2013

No todo es lo que parece.

Era un día normal como otro cualquiera. Yo caminaba por la calle con mis auriculares puestos. Estaba escuchando la canción "A thousand years" de Christina Perri. Me encantaba esa canción, era hermosa. Estaba tan distraída que no me di cuenta de que había un chico delante de mí, con lo que me tropecé con él y me caí al suelo. Estaba algo aturdida y con un dolor en la cabeza. Aquel chico, al ver que no me levantaba, me ofreció su mano para ayudarme. Fue cuando le miré la cara y me quedé embobada sin saber qué hacer ni decir. Al rato el chico me dijo:
-Hey, ¿estás bien? ¿Te he hecho daño?
-Ah... *seguía algo aturdida* sí sí, no te preocupes.
Me agarré a su mano y me levanté del suelo. Me limpié un poco de la suciedad que tenía y el chico se presentó.
-Hola, me llamo Kevin y bueno, perdón por lo de antes, no me había dado cuenta de que estabas delante de mi, lo siento.
-Ah no, no te disculpes. Ha sido culpa mía por no prestar atención. Y por cierto, me llamo Ashley, pero me puedes llamar Ash.
-Encantado de conocerte, Ash.
-Lo mismo digo Kevin.
Y sin darme cuenta, mis labios formaron una amplia sonrisa, estaba como feliz. Parece ser que a Kevin le dí una buena impresión, pues me dijo que si quería quedar para tomar algo. Yo acepté encantada y quedamos al día siguiente sobre las 5 de la tarde.
Cuando más se acercaba la hora de estar con él, más nerviosa estaba. No sé, parecía ser que sentía algo por aquel chico. Cuando ya eran las 5, yo ya estaba en la plaza. Habíamos quedado allí a esa hora. Kevin tardó tan solo un minuto, yo pensaba que tardaría más como mis amigos, pero me equivoqué. Al verlo llegar y acercarse a mi, algo me hacía sentir genial, demasiado. Me dijo que si me encontraba bien, pues me veía como embobada. Al decirme eso, no pude evitar ponerme colorada, no me lo esperaba. Kevin parecía que lo disfrutaba, se reía bastante y eso me hizo sentir un poco mal, pero se me fue cuando me dijo que nos fuéramos ya a tomar un helado. Era una buena temporada para tomar helados, ya hacía tanto calor. Fuimos a una heladería que estaba al lado de la plaza, nos sentamos en una mesa y mientras esperábamos a que nos atendiesen, nos pusimos a hablar. Me contó que era nuevo por el pueblo y que necesitaba conocer a gente para que le guiaran. Por eso no lo conocía de nada, ni de vista. Los padres de Kevin se divorciaron recientemente y él se mudó a este pueblo con su padre. Tenía una hermanita pequeña que se llamaba Allyson, pero ella se fue con su madre. A Kevin le dolió mucho que le separaran de su hermana, la quería mucho. Ahora tan solo puede verla la última semana de cada mes. Cuando me iba a decir el por qué se separaron sus padres, vino la camarera a atendernos. Pedí amablemente un helado de vainilla con chocolate y Kevin pidió un granizado de limón. Cuando se fue la camarera, le miré con una expresión de que siguiera lo que estaba contando, pero sin embargo, cambió de tema de repente. Pensé que sería porque aún le dolería hablar de eso, así que no volví a hablarle del tema. Hablamos de muchísimas cosas y aprendí bastantes cosas de él. Me contó que tuvo una novia de la que estaba totalmente loco por ella, pero sin embargo lo dejó porque según su ex, era muy posesivo. Yo pensé que su ex estaba totalmente equivocada, pues me parecía un chico muy simpático y para nada posesivo. Nos entretuvimos tanto que no me dí cuenta de la hora que era. Le pedí disculpas por irme así y quise irme enseguida a mi casa, pero antes de salir de allí, él me cogió el brazo para que me volteara y me dio un papel. No tenía tiempo de mirarlo, con lo que le di un beso en la mejilla para despedirme y me fui corriendo.
Al llegar a mi casa, tuve una regañina con mi madre por haber llegado tarde, pero le dije que no volvería a ocurrir y me metí en mi habitación. Eran las 11 de la noche y me encontraba algo cansada. Me empecé a quitar toda la ropa para ponerme el camisón. Cuando me quitaba la ropa, un papelito se cayó al suelo. Lo recogí y me di cuenta que era el papel que me dio Kevin. Lo abrí para ver que era y era su número. Apunté el número en mi móvil y le mandé al instante un WhatsApp. Mientras tanto me fui a seguir cambiándome, pues estaba medio desnuda.
Cuando volví, vi que tenía un WhatsApp. Yo estaba tan emocionada y era él que me había contestado. Pasé toda la noche hablando con Kevin, me encantaba hablar con él. Siempre sacaba conversación y me hacía de sonreír por cada tontería que decía.

Pasaron días, semanas, hasta meses y nos hicimos muy amigos. Les presenté a mis amigas y a todas ellas les encantaron, era muy majo. Mi amiga Sara se dio cuenta de que entre nosotros había algo, había química, como suele decir ella. Me convenció de que le pidiera salir a Kevin y eso hice. Bueno, casi que lo hice. Cuando estaba a punto de decirselo, las palabras no salían de mi boca, parecía que tenía un nudo en la garganta. Suerte que Kevin no era tonto y sabía lo que iba a decir, pero él no dijo nada, simplemente me alzó la barbilla con su mano y me besó. Fue especial ese beso, me sentía como si estuviese envuelta en una burbuja en el aire.

Desde el día que empecé a salir con él, todo me iba genial, estaba tan feliz que parecía que iba a explotar por tanta felicidad acumulada. Me trataba como una princesa en los primeros días y siempre iba a ser así. O al menos eso pensaba yo.

Ahora entiendo por qué decía su ex que era posesivo. No me quería ver con nadie si no era con él, ni siquiera con mis padres. Kevin quería que estuviese todo el rato con él, con lo que me agobiaba un poco, pues necesitaba espacio para mis amigos y mis padres. Pasó un tiempo en la que estábamos juntos y dios, era insoportable, me manejaba siempre. Me agobiaba tanto que ya ni quería seguir estando con él. Tomé una decisión y le dije que quedáramos, que teníamos que hablar. Quedamos en un parque donde no solía ir la gente, para poder así hablar tranquilamente y sin que nadie nos interrumpiese. Yo pensaba que se lo tomaría a bien y que seríamos amigos como antes. Me equivoqué. Me equivoqué totalmente.

Me pegó. Me dijo que no iba a permitir que le volviesen a dejar otra vez por la misma puta tontería y que si yo no era suya, no sería de nadie. Ese acto me dio muchísimo miedo, con lo que le mentí y le dije que no se lo creyera que era mentira, que yo le amaba. Él me miró con ojos tristes y me dijo:
-Lo siento mi amor, es que me tienes muy loco por ti y no quiero que la segunda persona que me tiene loco me deje y me destroce...
Esas palabras me dejaron algo rara, no era normal que me dijera eso. Le dije que me tenía que ir, que tenía que hacer unos recados con mi madre. Era mentira, no tenía que hacer nada, pero tenía miedo... le tenía miedo. Estaba sola en mi casa porque mis padres se habían ido esa misma noche de viaje, y al entrar a mi habitación, no pude aguantar más y me apoyé a la puerta cayéndome poco a poco al suelo. Abracé a mis piernas y me puse a llorar fuertemente. No me imaginaba que Kevin fuese capaz de pegarme. Me dejó un pequeño corte en el labio inferior, su puñetazo fue bastante efectivo. Ese hecho hizo que le tuviese miedo pero por otra parte hizo que no lo dejara para que no me hiciese más daño. Pasados unos días, yo perdí contacto con Kevin. Estaba tan tranquila en mi habitación, con la música puesta, cuando de repente oigo que llaman fuertemente a la puerta de mi casa. Me asusté en un principio, pero luego pude oír como alguien gritaba mi nombre. Era Kevin. Un escalofrío recorrió por todo mi cuerpo y me encontraba paralizada ante semejante situación. Tuve que reaccionar rápido para que Kevin no sospechase, así que le abrí la puerta. Nada más abrirla, él entro rápidamente empujándome hacía dentro. Me gritó:
-¿Se puede saber por qué coño me mentiste la otra noche? ¿Eh, imbécil?
-¿Qué? Espera, ¿cuándo te mentí yo?-no sabía que hacer, tenía bastante miedo-Yo que sepa no te he mentido en ningún momento...
-¡Sí! ¡Me mentiste diciéndome que tenías que hacer unos putos recados con tu madre, y resulta que esa misma noche tus padres se habían ido de viaje! ¿Por qué mierdas me mentiste? ¿Eh? ¡Dímelo ya!
Yo estaba callada, con la cabeza cabizbaja y poniendo mis brazos en modo defensa por si me pegaría otra vez. Pasado un rato en silencio, me volvió a decir:
-Ah... no me digas... Ya sé por qué es. Te doy miedo, ¿cierto?-no le podía mirar la cara, estaba aterrada-TE DOY MIEDO PORQUE TE PEGUÉ, ¿VERDAD?.

*Plas*

Tapé mi cara, estaba sangrando. Me había vuelto a pegar y esta vez más fuerte que la primera vez. La herida que tenía en el labio inferior de la otra vez se me había abierto más, haciéndome sangrar mucho. Le miré la cara y estaba enfadado, demasiado incluso. Con lo que me agarró las manos llevándome a mi habitación. Yo quería gritar, pero sabía que si lo hacía, me volvería a pegar, o incluso sería capaz de empujarme por las escaleras. Cuando ya habíamos entrado en mi cuarto, me empujó contra la cama y se puso encima de mí. Me besaba y me forcejeaba para que le correspondiese a sus besos. Como yo no lo hacía, se separó a escasos centímetros de mí y me volvió a gritar:
-¿ERES IMBÉCIL O QUÉ? ¿ME QUIERES BESAR DE UNA PUTA VEZ?
Yo no podía decir nada. Nada más intentar hablar, me dolía mucho el labio por la herida. Él, al ver que no podía decir nada, me volvió a pegar, obligándome a besarlo. Tenía que hacerlo o mi herida del labio se abriría más.

Ese momento fue el peor que tuve en mi vida. Se podría decir que me violó. Suerte que al menos lo hizo con protección, pero aún así, me hizo bastante daño. Entre que no tenía precaución y las heridas que tenía, no estaba disfrutando para nada.

Cada día que pasaba, más rara era. Más callada, más tímida, más aterrorizada... Mi amiga Sara se dio cuenta de que algo pasaba, e incluso me preguntó que si teníamos problemas Kevin y yo. Tuve que mentirle y decirle que no, que todo entre nosotros iba bien. La gente cuando veía mi enorme herida me preguntaba que qué me había pasado. Yo les decía que me había cortado accidentalmente. Todo era mentira. Mentiras y mentiras.

Más pasaba el tiempo y más heridas tenía por mi cuerpo. Cada cosa que hacía estaba mal. La autoestima que tenía estaba por los suelos, no tenía personalidad propia y la Ash de siempre había desaparecido.
Un día, Kevin me llamó para ir a su casa, que según él, su padre no estaba. Yo ya sabía para qué me quería... para hacerme sexo. O mejor dicho, para violarme. Cuando ya estaba en su casa, en su habitación, me dijo que esperase, que saldría a comprar unas cosas. Yo como tonta, le dije que vale. Pasados unos minutos, estuve pensando, y tenía miedo de que volviera. Así que antes de que volviese, me fui de allí. Para mi mala suerte, me pilló saliendo de su casa. Le vi la cara. Tenía esa cara de cuando me quería pegar, pero esta vez no, esta vez no me pegaría. Salí corriendo lo antes posible para que no me pillara. Él, al verme correr, tiró todas sus bolsas y corrió tras mío. Me voceaba delante de todos, pidiéndome que parase, pero no le iba a hacer caso. Mis piernas tan solo querían huir de aquel monstruo que me perseguía. Corrí y corrí hasta que llegué a un bosque. Me paré para respirar, estaba exhausta. Miré por todos los lados para ver si estaba, pero no, estaba sola. Me senté en un tronco que había para descansar un rato. Estaba tranquilizándome, cuando de repente, oí una rama partiéndose detrás de mi. Me giré aterrorizada y allí estaba, enfurecido. Me levanté caminando de espaldas rápidamente, cuando me tropecé con una roca que había y me golpeé la cabeza. No veía nada, solo una sombra. Estaba ciega por un momento, pero abrí más mis ojos y él estaba allí. Cuando de pronto, puf, todo se puso negro.

Volví a abrir mis ojos y vi un techo blanco. Miré a mi alrededor y había un monitor cardíaco. Seguía mirando por mi alrededor y vi a Sara sentada en un sofá durmiendo. Se ve que hice un ruido porque la desperté. Sara, al verme despierta, se emocionó mucho. Se acercó a mi con ojos lagrimeantes y me preguntó:
-Dios, Ash, ¿estás bien? ¿Te encuentras mejor?
-¿Eh?... Sara, ¿qué ha pasado? ¿Dónde estoy?
-Por dios Ash, ¿no recuerdas? Kevin te dio una paliza en la cabeza... Suerte que yo os seguí porque os vi corriendo y noté que algo estaba ocurriendo. Al ver que te pegó, inmediatamente llamé a las seguridades. Yo salí muy enfadada del escondite y corrí hacía ti y le grité que por qué te hacía eso, que no tenías la culpa.
-Y... ¿qué le ha pasado?
-Tú tranquila Ash, a ese chico no le volverás a ver más.
-Dios... gracias Sara, de verdad.-le abracé llorando, por fin me sentía segura.
Le pregunté que cuando sería el juicio con Kevin y me dijo que ya hubo juicio y le habían condenado. También me dijo que estuve en coma 2 meses y varios días, por eso estaba tan emocionada al verme despierta.

A pesar de todo lo que pasó, esa experiencia fue la peor que tuve, pero se acabó. Esa pesadilla se terminó. Por fin me sentía bien y segura. Desde entonces, no volví a permitir que ningún ser humano me controlase.

miércoles, 25 de septiembre de 2013

Promesas.

¿Nunca has tenido esa sensación en la que estás rompiendo una promesa que te hiciste a ti mismo? ¿Nunca has sentido que estás fallando a esa persona que le hiciste la promesa? ¿No has sentido alguna vez, que por más que quieras cumplir la promesa, no puedes hacerlo? ¿Por qué?

Por el simple hecho del tener miedo a la reacción que podamos obtener de la otra persona, por el simple hecho de la vergüenza, por el simple hecho de pensar que te van a remover más la herida, por el simple hecho de no querer caer en lo mismo, por el simple hecho de muchas cosas. Tantas cosas, tantos sentimientos.

La mayoría de las personas no suelen cumplir con sus promesas, ¿por qué? Por muchas cosas. Por el tiempo, por la personalidad, por personas ajenas, por miedo, por vergüenza, por no querer sufrir, etc.

Pues tengo que decir que yo no, yo no rompo mis promesas. Pase lo que pase, siempre intento cumplirlas, me duela o no. Hace poco tiempo, una persona me dijo que no hacía promesas por ese mismo hecho, por el hecho de que hacen daño y te arrepientes. Yo tuve que callarle con un "Yo sí hago porque sé que no me arrepentiré. Dolerme puede ser, pero arrepentirme nunca."

Es igual como que le prometí a una persona estar allí para ella eternamente, y me duele, pero no me arrepiento. O también que le prometí a otra persona hacerme un tatuaje sobre ella y yo, y aunque ahora no nos digamos ni "hola", yo me lo haré, porque lo prometí. Sí, me duele, pero... ¿me arrepiento? ¿En algún momento dije que me arrepiento? Si alguien dijo eso, está totalmente equivocado. Pudo haber escuchado un "me duele", "estoy cansada", o cosas así, pero jamás un "me arrepiento" dicho por mi boca.

miércoles, 18 de septiembre de 2013

Secretos.

Me he dado cuenta de que muchas personas ocultan algo en su vida que nadie sabe. Todos tenemos un pasado o un secreto que no queremos desvelar al mundo. No es que intente convenceros de que lo destapéis, solo estoy diciendo que cada quién oculta algo. Solemos decir que no tenemos nada que esconder cuando en realidad no es así. Todos tenemos un secreto que nadie sabe y ocultamos por muchas razones. Puede ser por miedo, vergüenza, arrepentimiento, tristeza... y muchas más cosas.

A mi cuando la gente me dice que no tienen ningún secreto que no sepa, yo sinceramente pienso que me están mintiendo. En el fondo sé que sí oculta algo y aunque eso me moleste un poco, lo entiendo porque yo también tengo secretos no desvelados.

Esto es de lo que he reflexionado hoy y quería compartirlo.

No os olvidéis, todos tenemos secretos.

martes, 17 de septiembre de 2013

Pues esta entrada es para comentar que a partir de ahora, solo podré publicar nuevas entradas los viernes, ya que el instituto ha comenzado y casi ya no tengo tiempo ni de coger el ordenador. Los domingos puede que publique algo, pero no estoy segura. Así que eso, tened en cuenta, cada viernes, una nueva entrada. Hasta este viernes.


domingo, 15 de septiembre de 2013

Estoy cansada...

Que sí, que estoy cansada de todo. Cansada de ser fuerte, cansada de seguir adelante, cansada de tener esperanza de que salga bien y al final sea al contrario, cansada de no rendirme, cansada de decir "no pasa nada, todo irá bien", cansada de luchar por algo que luego no sale bien, cansada de dar frente, cansada de derrumbarme y levantarme muchas veces, cansada de fingir una sonrisa, cansada de estar siempre rayada, cansada de ver como la persona que me gusta no me va hablando, cansada de intentar salir todos los días para animarme (y es así, pero poco tiempo), cansada de mirar algo y recordar eso, cansada... Estoy cansada...

Tan solo quiero huir, huir de todo, huir de aquí y empezar un nuevo camino, empezar de cero e intentar hacer las cosas mejor. Ojalá hubiese un botón que pusiese "empezar de cero" porque le daría sin pensarlo. Quiero empezar de cero, quiero dejar este lugar, quiero irme a un sitio en donde nadie se preocupe de mi y nadie me eche de menos, quiero estar rodeada de extraños, desconocidos; quiero ser alejada del mundo, quiero olvidar todo y empezar de nuevo.





Por una vez en mi vida... quiero ser cobarde.

viernes, 13 de septiembre de 2013

Un poco de amor, no viene mal.

Yo no me rindo, nunca lo he hecho, pero hay veces en las que estás cansada de tanto sufrir y necesitas tanto a ese alguien, ese alguien que te diga un sincero "te quiero", que te un abrazo de esos en las que te sientes segura, y si resulta que está lejos, que te llame preocupad@ por cómo estás y te diga "tranquila, todo irá bien", que haga todo lo posible para hacerte sonreír, que se ponga a hacer idioteces por solo una sonrisa tuya, etc. Yo... necesito urgentemente a alguien así. Cada día me siento algo rara por seguir teniendo este vacío que nadie consigue llenarme. O si creo que me lo llenan, me lo vacían de nuevo. Me pongo a pensar en esto y me pongo triste por no tener una persona así. Sí, me diréis que una relación no lo es todo, pero no me negaréis que a veces necesitáis a ese alguien que te diga "te quiero" o "te amo", que te diga "buenas noches, princesa, sueña conmigo y espero que descanses bien, te quiero", que se haya comprometido a que nadie te haga daño, que se preocupe por cada lágrima que recorre por tu mejilla, que te haga mil y una sorpresas en días no importantes, que se coma la cabeza por cada cosa que haces, que tenga celos por tonterías, que te diga cosas bonitas cada día que pasa, que los momentos que paséis juntos se hagan inolvidables, que cada vez que os veis, esa persona no trate de separarse de ti; que ese alguien aproveche al máximo el tiempo que está a tu lado, que cuando estás mal primero trate de calmarte y luego te pregunte que por qué estás así, que te apoye en cada momento que pase, que te prometa estar a tu lado para siempre, que te ponga apodos cariñosos a los que a nadie más les dice y por último y no menos importante, que te demuestre lo tanto que te ama cada día. No me podéis decir que no necesitáis un poco de cariño y amor en vuestra vida. Sí, te puede animar la amistad que tienes con tus amig@s, pero siempre tendrás a esa voz que te dirá "necesitas un poco de amor".

jueves, 12 de septiembre de 2013

La bella y la bestia.

He leído artículos sobre mujeres y hombres que eran maltratados por su pareja. En el año 2012, 600.000 mujeres han sido maltratadas por sus respectivas parejas pero sin embargo el número de hombres maltratados no me lo sé. He buscado toda la información posible y poco me ha servido.

He leído que los hombres maltratados no denuncian a sus mujeres por la mismísima vergüenza o porque pensaban que eran culpa suya. Con las mujeres pasa casi lo mismo, aunque normalmente suele ser para no preocupar a su familia o que los demás piensen que es débil y puedan aprovecharse de ella. Por eso, ambos sexos suelen callarse cuando son maltratados.

He hablado de estos temas con mis amigas y según ellas si les pasase algo, si sus parejas las pegarán, ellas enseguida denunciarían. Pero yo pienso, que por mucho que diga que lo denunciaría al instante que ocurriese algo malo, creo que realmente no diría nada. Porque me daría miedo la reacción de otra gente, no querría preocupar a mi familia y seres queridos y preferiría enfrentarme yo sola sin ayuda alguna, porque es entre mi pareja y yo, no entre mi pareja y el mundo. Sé que parece una locura, pero es lo que pienso. Para que lo denunciase, me tendrían que estar convenciendo durante mucho tiempo, porque yo soy muy cabezona y no suelo hacer caso. Yo es que no sé... es un tema demasiado delicado y difícil de pensar. Le he estado dando muchas vueltas sobre este tema y sobre lo que haría, y creo que sería eso. Callarme. Sé que mucha gente me dirá que no, que soy muy valiente, que tengo que decirlo y todo eso, pero yo sé que no tendría la demasiada fuerza de voluntad para poder hacerlo.

Ahora os diré qué es lo que haría si tuviese a un familiar o un amig@ que estuviese en este tipo de situación. Yo lo que haría, sería convencer a esa persona de que no se la merece, que si una persona te quisiese de verdad, te haría de todo menos daño, que no tiene por qué callárselo y que se merece a una persona que de verdad te quiera. Si viese que no me haría caso, pues entonces es cuando ya no sabría que hacer... porque sé que si a mi me estuviesen obligando a denunciarlo y si me dijeran que si no lo hago yo, lo haría esa persona pues me enfadaría tanto que no volvería a hablar a esa persona.

Puf... esto es demasiado chungo, no sé qué haría de verdad. Aún sigo dándole muchas vueltas. Y ya sé que he dado respuestas equivocadas, pero esa es mi opinión de momento y nadie me la va a cambiar. Lo que sí sé perfectamente es que no debería de haber violencia de género.


miércoles, 11 de septiembre de 2013

Ella, mi todo.

Siempre escucho su sonido desde el despertar hasta el dormir, siempre me acompaña a todas partes, siempre consigue aislarme del mundo, siempre me calma, siempre está allí, siempre me hace sonreír aunque a veces me pone triste, siempre dice palabras y me identifico, siempre hace que me sienta genial, siempre consigue que razone con sus letras... Cada vez que me levanto, siempre la busco para escucharla porque así me puedo levantar de buen ánimo. Yo intento poder escucharla todos los minutos de cada día que pasa, aunque no siempre es así. Cuando estoy con mis amigas, a veces suelo escucharla porque aparte a ellas también les encanta, pero a mi es la que más me encanta y más adoro. Cuando quiero dormir, suelo escucharla y siempre sueño con su sonido. Su sonido es tan precioso depende de cómo lo oigas. A veces puede sonar horrible y fatal, pero otras veces, es tan preciosa que solo te apetece escucharla durante toda tu vida. Si sabes escucharla bien, entonces sabrás apreciarla bien, tal y como estoy haciendo yo. Yo espero que hasta el fin de mi vida, ella esté a mi lado, provocando esos sonidos tan hermosos que a mis oídos les encanta escuchar. Hay gente que dice que se cansa si la escucha tanto tiempo, pero a mi no me ocurre eso, la adoro. No entiendo como se pueden cansar de un sonido tan hermoso y precioso, a mi es que me conquista el corazón. En fin... que ella es mi todo.

Creo que muchos de vosotros estaréis pensando que estoy hablando de una persona muy especial para mi, pero no, estoy hablando de ella y todos la conocéis. Estoy hablando de la música y ella sí que es especial para mi.

Que todo sea como antes.

Ayer por la noche busqué a una persona porque quería saber como le iba en la vida y eso. Pasa que fue una persona en la que antes me molaba mucho... y ha sido un gran error el buscar su nombre.

Buscar su nombre es como volver a buscar a esa persona para que vuelva a formar parte de tu vida... y eso es un grave error. Yo no sabía que iba a sentirme así, e incluso había pensado que ya no sentía nada, pero parece ser que me equivoqué. El ver su perfil, con sus fotos y lo que escribía, me ha hecho dar cuenta de que realmente quiero a esa persona a mi lado. Pero eso no va a poder ser, porque ya lo intenté una vez y fracasé. No pienso volver a caer en lo mismo, aunque... si esa persona volviese a mi y me pidiera que fuese su pareja, creo que diría que sí. Es inevitable, tengo tantos buenos recuerdos junto a esa persona... Tantas risas que habíamos compartido, tantos enfados que se solucionaban, tantos secretos que nos intercambiábamos... en fin, tantos momentos junto a esa persona.

Creo que es una de esas personas en la que deseas que forme parte de tu vida, y por más que quieras, no va a poder ser así. Ojalá y que me equivoque, que aunque no tenga ninguna relación con esa persona, quiero que al menos permanezca a mi lado, como hacía antes. Yo... quiero que todo sea como antes.

martes, 10 de septiembre de 2013

"Si siempre soy yo, acabas perdiéndome."

¿Nunca habéis tenido a esa persona en la que si no le decís nada, no os habla en vuestra puta vida?
Yo por desgracia sí, y no solo una persona, sino varias. Pero la que más me ha afectado era una personita que me alegraba mucho todos los días. Hasta que me fui de vacaciones a Alicante con mi hermana, desde allí me dejó de hablar. Dejó de decirme "te quiero", de contarme sus cosas, de decirme que yo era más preciosa que ella, de intentar sacarme una sonrisa cuando estaba mal, de contarme lo que hacía cada día, de contarme lo que le pasaba, de pelearse con otra gente si me habían insultado, de defenderme... directamente dejó de hablarme y van como 3 meses que llevamos sin hablarnos. Realmente me afecta que no me hable, pero si para eso tengo que estar siempre diciéndole yo "hola", prefiero no decirle nada. Y si ahora me pongo a pensar, me doy cuenta que ya lo ha hecho más veces, el no hablarme me refiero. Si yo no le decía nada, ella ni mu. Se lo dije unas cuantas veces y ella diciéndome que era porque se olvidaba o porque le hablaba mucha gente... ¡Y una mierda! Era porque no me quería, así de claro. Joder, que tanta manía de decirme que me quería más que yo... ya veo ya, pues mucho no lo demuestras eh. Así que a tomar por culo ya, si veo que siempre soy yo la que habla primero, a la mierda va esa persona. Yo lo que quiero es que hable yo a veces y a veces esa persona, porque al menos así sé que ha pensado en mi. 

Así que eso, yo voy avisando, como vea que siempre soy yo... Al final acabas perdiéndome.

lunes, 9 de septiembre de 2013

Mi verano.

Pues este verano me ha deparado muchísimas cosas, he conocido a mogollón de gente. Lástima que no haya sido cerca de por mi pueblo, pero bueno, no se le puede hacer nada. Este verano ha sido muy diferente, demasiado. He disfrutado, he llorado, he reído, me he enfadado, me he puesto contenta, me he puesto triste, me he sentido sola, me he sentido querida, me he sentido genial, me he sentido como una mierda... Mil maneras me he sentido este verano. 

Me he propuesto a hacer mil cosas y pocas han podido ser hechas, pero no pasa nada, ya he hecho una lista de cosas que hacer en el verano 2014.

He conocido a una persona que ha hecho especial parte del verano, hace pocos días he conocido a unas chicas que son la puta hostia y me hacen de reír mucho y también me animan bastante. He podido ver a mi hermana más tiempo y eso me ha puesto feliz. Me han dicho cosas duras y eso ha provocado un llanto terrible bajo la ducha. He hecho botellones al lado de mis amigas y me he divertido mucho. He conocido a gente muy maja pero ahora mismo no sé nada de ellas xD He tenido uno de esos de "amor a primera vista" con una persona que he visto pero no la he vuelto a ver, que penica. La verdad es que este verano ha pasado de todo, de todo lo bueno y de todo lo malo. Pero este ha sido un verano inolvidable y siempre quedará en mi memoria. Y bueno, lo que quería era despedirme del verano *que no ha acabado aún pero quería hacerlo ya*, de sus fiestas, de la piscina y todo lo que se lleva consigo y decir hola al instituto, a los estudios, a los profesores y al invierno. Adiós verano, no te olvidaré. Hola invierno, ¿listo para sorprenderme?
Este vídeo no puede faltar en mi blog, yo es que me despollo entera en serio. Putos gatos xdxdxd

No me mientas.

Porque no falta esa persona que te miente cada día que pasa. Esa persona que te mira a los ojos y te miente perfectamente. Esa persona que te dice "jamás te dejaré" y al final te acaba dando de lado.

Yo ya he conocido bastantes personas que me han mentido, sea por WhatsApp, a la cara, por donde sea. Hubo una persona en la que me dijo que jamás me daría de lado, y si yo misma no le hablo, no nos hablamos ni en un millón de años. No entiendo qué tiene la gente para mentir con cosas así. Es decir, yo si digo "prometo estar a tu lado apoyándote" lo cumplo, siempre que vea que la otra persona hace lo mismo.

Hay gente que miente por muchas razones, que si es por mi bien, que si es porque no podía decir la verdad, que si porque les ha dado la gana bla bla bla. A mi es que me da igual, joder, me da igual la verdad que sea, tanto si es que no te gusta esa persona y es otra como si hubieses matado a alguien, es que me da igual. Tan yo solo pido saber la verdad, porque creo que tengo derecho a saber lo que está ocurriendo en realidad, ¿no?

Dejad de pensar en si me enfadaré o no, en si me dolerá o no, en si me afectará o no y poneos a pensar en que necesito saber la verdad por mucho que duela, que es lo correcto.

domingo, 8 de septiembre de 2013

Pues es demasiado tarde como para hacer una entrada especial, así que mejor mañana hago una mejor entrada xD.



Yo happy por mi nuevo blog :D